via HIRC blog
Philip Torrey is the Managing Attorney for the Harvard Immigration and Refugee Clinical Program, the Director of the Harvard Crimmigration Clinic, and a Lecturer on Law at Harvard Law School.
Phil’s interest in immigration began when he worked at an immigration clinic in law school. There, he represented a woman from the Democratic Republic of the Congo in her asylum case, and this work sparked his dedication to fight for immigrants’ rights. After graduating law school, Phil joined a large law firm, working as a corporate litigator, but continued to feel compelled by immigration law. While at the firm, he worked with Greater Boston Legal Services (GBLS), which he loved, and this eventually led him to leave his job at the firm and volunteer at GBLS. From there, he transitioned to his position at Harvard.
Phil specializes in crimmigration, which focuses on the intersection of immigration law and criminal law. Although these two systems of law are currently intertwined, Phil argues that they should be completely separate and that, when we conflate the two, it causes damage on an individual and a societal level. Because of this, Phil works to try to separate the immigration and criminal law systems through case work, appellate litigation (generally around crime-based grounds of removal and criminal bars to certain kinds of immigration relief), and education.
Although Phil notes that wins in his field are, unfortunately, “few and far between,” he explains that those rare victories motivate him to keep fighting. He also stays grounded by spending time with his young children, playing basketball, running, and hiking.
Phil appreciates the kind of relationship-building that his job allows him to do. He particularly loves working with students, who he feels consistently come up with unique ways to approach problems. He also derives much satisfaction from being able to work with clients; he feels that it’s essential to give his clients the opportunity to be heard, no matter the outcome of their cases.
Phil’s deep love for and commitment to his work are evident. In fact, when asked his favorite part of his job, he responded, “My entire job is great.”
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Philip Torrey es el abogado director del Programa Clínico de Inmigración y Refugiados de Harvard, director de la Clínica de Crimmigración de Harvard y profesor de leyes en la Escuela de Leyes de Harvard.
El interés de Phil por la inmigración comenzó cuando trabajó en una clínica de inmigración en la escuela de leyes. Allí representó a una mujer de la República Democrática del Congo en su caso de asilo, y este trabajo despertó su dedicación a la lucha por los derechos de los inmigrantes. Después de graduarse de la escuela de derecho, Phil se unió a un gran bufete de abogados, trabajando como litigante corporativo, pero continuó sintiéndose obligado por la ley de inmigración. Mientras estaba en el bufete, trabajó con Servicios Legales del Gran Boston, (SLGB) lo que le encantó, y esto le llevó finalmente a dejar su trabajo en el bufete y ser voluntario en SLGB. De ahí pasó a su puesto en Harvard.
Phil se especializa en la crimmigración, que se centra en la intersección de la ley de inmigración y la ley penal. Aunque estos dos sistemas de leyes están actualmente entrelazados, Phil argumenta que deberían estar completamente separados y que, cuando mezclamos los dos, causa daño a nivel individual y social. Debido a esto, Phil trabaja para tratar de separar los sistemas de inmigración y la ley penal a través del trabajo de casos, litigios de apelación (generalmente en torno a motivos de expulsión basados en el crimen y barras penales a ciertos tipos de alivio de inmigración) y educación. Aunque Phil señala que las victorias en su ámbito son, desafortunadamente, “pocas y distantes”, explica que esas raras victorias lo motivan a seguir luchando. También se mantiene en tierra pasando tiempo con sus hijos pequeños, jugando al baloncesto, corriendo y haciendo senderismo.
Phil aprecia el tipo de construcción de relaciones que su trabajo le permite hacer. Particularmente le encanta trabajar con los estudiantes, que siente que constantemente vienen con formas únicas de abordar los problemas. También obtiene mucha satisfacción de poder trabajar con los clientes; siente que es esencial dar a sus clientes la oportunidad de ser escuchados, sin importar el resultado de sus casos.
El profundo amor y compromiso de Phil con su trabajo son evidentes. De hecho, cuando se le preguntó su parte favorita de su trabajo, respondió: “Todo mi trabajo es genial.”
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